El caballo que causó momentos de alarma el pasado miércoles al desbocarse cerca del recinto de la Feria de Sevilla ya ha sido sometido a revisión veterinaria tras ser interceptado por los servicios municipales. El animal arrolló accidentalmente a un bebé de 11 meses y a un hombre de unos 40 años, ambos trasladados al Hospital Virgen del Rocío con lesiones.
Varios ciudadanos alertaron al servicio de emergencias 112 tras presenciar al equino corriendo sin control por la vía pública. De inmediato se desplazaron efectivos de la Policía Local y equipos sanitarios, que atendieron a los afectados.
Una vez asegurado el animal, profesionales del Centro de Protección Animal lo trasladaron hasta el retén de veterinarios habilitado en la calle Costillares. Allí se le realizó una inspección para valorar su estado físico y se levantó el informe correspondiente. Según fuentes municipales, el caballo se encontraba en buen estado general y su documentación estaba en regla.
El suceso ha reabierto el debate sobre las condiciones de seguridad en las zonas adyacentes al recinto ferial y la necesidad de reforzar los protocolos de control animal durante eventos de gran concurrencia como la Feria de Abril.









